Eran como las ocho de la noche aproximadamente. Salimos de "metiches" a ver que era lo que con tanta curiosidad veían. Nos dijeron que estaban viendo al transbordador espacial discovery que orvitaba la tierra. Pues si, claramente se veía que no era la luminocidad de un avión común y corriente no, se trataba del transbordador espacial discovery. Este viaje es el último del transbordador espacial pues supuestamente su vida productiva termina en el año dos mil diéz.
Nos ha causado tanto gusto y orgullo el verlo, que muchos otros clientes salieron a verlo también al ver que ya eramos como siete personas que bobeabamos al firmamento. Afortunadamente hizo noche clara. Se podían ver las estrellas perfectamente y a Orión se le podía ver claramente. Todo ésto vimos hasta que desapareció el transbordador entre la ciudad de Seattle. El señor amablemente nos comentó que nuevamente lo podríamos ver a las 10:49 pm hora local.
Muy prestos estabamos otra vez a la citada hora. Con un cohete espacial que decora la esquina de la cuadra, volvimos a ver al discovery. Nuevamente acompañado de no se que pues se veían dos luces. La primera de menor tamaño que la segunda. Nos preguntamos que sería pero nadie supimos por que son dos luces las que se ven. Creo que en éste viaje va al lado de la tripulación, un profesor de ciencias naturales de Puerto Rico. Las bellezas que verá desde tan lejos y lo que se divertirá. Me imagino que tendrá en el futuro, clases con los chicos interesantísimas pues todo mundo le preguntará como fué tan significativo viaje. De veras que fué impresionante e increíble el pensar lo que los humanos somos capaces de hacer cuando queremos. También somos muy testarudos cuando nos lo proponemos e injustos cuando estamos del lado contrario. En fin, que las imágenes las he tomado de la revista National Geography. Si por alguna causa debo quitarlas, solo hace falta que lo digan.
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