domingo, 23 de enero de 2011

La Fiesta a la Virgen de mi Pueblo, Nuestra Señora de la Candelaria, en Pueblo Nuevo Guanajuato.




Como cada año y desde hace muchisísimo tiempo en mi pueblo, ha llegado otra vez, la fiesta en honor a la Mayor Gloria de Ntra. Sra. de la Candelaria, la Virgen de mi pueblo, Pueblo Nuevo Guanajuato. Es la fiesta religiosa más importante del municipio y la celebramos desde tiempos perdidos en el tiempo. Supongo que se le celebra, desde que la Santísima escultura de la Virgen de la Candelaria llegó a nuestro pueblo quizá traída, por los frailes agustinos que eran quienes tenían a su cargo a nuestra parroquia que en esa época, debió de ser, lo que llamamos ahora, la tercera orden con su panteón adjunto en donde ahora se localiza el atrio, la parroquia y la notaría.





Recuerdo hace muchos años, cuando el Sr. Cura Miguel Méndez Pérez conectó el drenaje en la parroquia. La cantidad de esqueletos de nuestros antepasados que se vieron y existen allí en el atrio era increíble. Recuerdo que al ir a la doctrina, y veíamos a los trabajadores escarbar y sacaban los huesos del caño que hacían para poner la tubería y para después, volver a depositarlos allí mismo, en donde han descansado por cientos de años. Recuerdo que sacaron a unos gemelos depositados en una sola caja ancha y con los dos cuerpos de unos infantes colocados a la par.





Me figuro también que en esa época, digamos doscientos años, solo existía Pueblo Nuevo como un pueblo pequeñísimo. Los límites de la población eran hasta la orilla de la tienda de La Raspa de Guadalupe Hernández y no más lejos que la calle de Morelos. Aún en época en que todos quizá recordemos, el pueblo existía solo hasta la calle de Vasco de Quiroga y no más lejos del campo deportivo. La Amargura se veía lejísimos en la distancia y lo mismo el cerro de las campanas y La Quinta de "Mingo" Domingo Acosta y la tía "Fina" Josefina González era fuera del pueblo cruzando varios terrenos. En la calle Allende, solo había unas cuantas casas en la zona poniente y terminaba con el palo seco en el lado norte de la calle. El palo seco era un tronco de un árbol, seco que existió allí por muchos años, de allí el nombre de la zona en la actualidad y era como el punto de inicio del camino del Paso de Guadalajara. También decía la gente al referirse a esa parte del pueblo, "por la capillita del Sr. Cura". Porque existió allá una capilla creada por el Sr. Cura Librado Ramos y que seguramente era como inicio de otra parroquia por lo "lejos" de la plaza y de la parroquia principal y para dar servicios eclesiásticos a la gente de esa zona del pueblo.






Ahora, para una descripción de una fiesta a Nuestra Señora de la Candelaria en el pueblo, digamos a principios del siglo pasado. Mi abuelo, J. Jesús González Solís me platicaba que cuando él era pequeño, 1915 al 1920. Solamente se ponía una ola hecha de madera en la esquina de la tienda de Chevito Saldaña, y lo hizo por muchos años. Después existió "La Ola giratoria de los Villanueva" que se llamó, "La Pajarera". Era el único "juego mecánico" de esa época. También venían al pueblo unos danzantes que bailaban en un entarimado y se ponían por "la orilla del río" enfrente al rastro municipal, ahora es un camino, en esa época y hasta no hace mucho tiempo, era la bajada al río Lerma. Supuestamente hacían un hoyo en el suelo, colocaban una tarima y sobre ella, bailaban toda la noche. Nos decía mi abuelo que hacían tanto ruido, que se escuchaba hasta la plaza de la población sus zapateados.




Llegaban puestos de Celaya con las tradicionales máscaras y caballitos de cartón. Muñecas de cartón para las niñas que, aunque lo tradicional es venderlas para la cuaresma, las vendían en el pueblo en el novenario. Hace unos años, fuímos a Celaya a visitar a uno de los "cartoneros" artesanos y nos contó que ellos iban a Pueblo Nuevo a vender sus productos pero, que en la actualidad no lo hacen porque les cobran muchísimo de "plaza". Esa es una de las causas por la que los vendedores de Celaya no hayan regresado jamás. Vendían todo tipo de juguetes manuales, ollas en miniatura para las niñas que ya desde pequeñas se les ponen "roles" que deberán ejercer en su vida adulta. Toda una mamada en mi punto de vista y que reafirma el machismo en los hombres. Pero, en realidad no iban muchos puestos que digamos. Cuando yo era niño, se ponía un puesto enorme de dulces típicos y nueces de varios tipos de la región en frente del portal de la casa de las Ramos. Era el mejor puesto porque estaba hecho de varillas de acero y muy bien protegido con láminas de metal, los demás eran hechos de madera y cubiertos con mantas. Por muchísimos años, se colocó casi al terminar el portal Hidalgo en la parte sur, un puesto con un muñeco que un viejito de Celaya le daba vuelta a un disco de música que estaba lleno de fichas con números por así decirlo. El muñeco llevaba una varilla que al subirlo, se atoraría en una de las "fichas" que tenían una argolla y un número. Si se lograba que el muñeco se atorara, pues frente a él tenía una manta con los números y en cada número, una bolsita de papel con un regalo. Por lo regular eran monos de plástico, anillos de aluminio, una corneta de hoja de lata o hasta un peso de plata, etcétera. A veces, no tocaba nada y el señor de todas formas les regalaba algo a los niños. Recuerdo que esas personas que vendían allí, cocinaban en el mismo puesto y allí mismo comían y dormían. Le contaron a mi abuelo que fueron sin dejar de ir al pueblo por más de cincuenta años cada fiesta.



Frente al portal Zaragoza y también cerca de la parroquia, se ponían a vender los del pan de Acámbaro. Un pan horroroso, pintarrajeado de color de rosa subido, seco, viejo y con pasas que se las ponían a cada pan partido a la mitad mientras uno veía. ¡Muy mal pan! Y el pan del pueblo es miles de veces superior a ese pan horroroso. Solo van a darle mal nombre al verdadero pan de Acámbaro. Vendían también pan en pequeños puestos iluminados con un "aparato" de petróleo. (Un aparato es un bote de lámina que le han puesto mecha y lo han adaptado para que funcione como lámpara, lo llenan de petróleo para que de iluminación pero también hacía que el pan oliera y supiera a petróleo). Quienes vendían el pan traían su "espanta moscas". Una vara a la que le ponían en la punta, una bolsa de plástico hecha hebras para espantar a los bichos. Ni hablar de la higiene en esos puestos, ni siquiera tenían agua para lavarse las manos ni baños en todo el pueblo. La gente hacía sus necesidades en "la orilla del pueblo", si, al dar vuelta en la Huerta, se encontraba uno con una escena de caca por todos lados. Era muy antihigiénico y así se hacía.




También iba al pueblo una carpa con la lotería en donde se jugaba a la lotería con enormes cartas y se "cantaba" la lotería, yo recuerdo haber visto una carpa enorme que se ponía enfrente del portal de Pancho Mota. Nos contaba mi abuelo que también llegaban los titiriteros. Existió una empresa muy popular en esos años de títeres que creo llegó a ir al pueblo en esa época. Los Hermanos Aranda creo que se llamaban y una vez, cuando éramos muy chicos, nos llevaron mi madre y mi tía Lupe a ver a los títeres. Recuerdo que pusieron la carpa a un lado de los portalitos de Don Rafael López. En lo que en esa época era un camino y la huerta "del sapito" al lado. Eran la misma empresa de titiriteros que iba al pueblo cuando mi abuela era una niña. Ella los recordaba con gusto y recordaba el nombre de esos titiriteros. Lo que recuerdo era que los títeres eran de unos sesenta centímetros de altura y muy bien hechos. El tallado era perfecto y los vestidos igualmente bien hechos. Recuerdo que hicieron la interpretación de Lucha Villa y de Lola Beltrán con unos títeres que hacían que se doblaran hasta atrás al ritmo de música de mariachi. También tenían una escena en donde aparecía un barco con olas y se escuchaba el viento soplar y las velas romper. Representaron una pelea de gallos con gallos naturalmente marionetas y tenían tanta destreza los titiriteros que era de sorprenderse o, eso me parecía a mi quizá por mi edad. Es muy divertido ver títeres y marionetas o el teatro guiñol cuando uno es un niño.

En esas épocas de principios de la década de 1920. Llegaba gente a hacer negocio con música. Aunque no había discos, existían unos como botes por así describirlo; que giraban y tocaban una música en muy bajo tono al pasarle una aguja, eso nos decía mi abuelo. Supuestamente éstos comerciantes, se colocaban en el portal de "Trinidá la potranca", en la ahora casa de mi tía Eufrosina González. Traían unos audífonos en donde se escuchaba la música. Decía él que mi tía Pachita Pérez, esposa de dos de mis tíos, había grabado algunos de esos "discos" y que los tocaban en el pueblo.

También a la plaza mayor o principal, en donde ahora es el jardín, llegaban muchos puestos con ollas y fruta en esa época de hace ya cien años porque no existía el jardín. Las frutas que decía mi abuelo que vendían eran cañas, jícamas, naranjas, charamuscas, semillas de calabaza y cacahuates. Me figuro que la fiesta era muy austera. No existían las grandes comodidades con las que gozamos ahora. La mayor parte de la gente tenían en su propio huerto, naranjos, limoneros, guayabos y moras. Eso de vender cocos no existía porque no tenían el medio de transportarlos desde la costa. No había agua corriente y se tenía que sacar del pozo con una olla. La plaza principal era una explanada con el quiosco en el centro. No se si esa parte de la plaza estaría empedrada con lozas pero creo que no, no existían bancas como ahora y solo había algunas "lunetas" (así les llamaban) hechas de ladrillo y cemento y no muchas. Era allí en donde se ponían los puestos que vendían todo tipo de utensilios de barro hechas en Abasolo y Michoacán. Debemos pensar que en esa época, todo mundo llegaba en burro o caballo. No existían las camionetotas que tienen los de la Noria de Mosqueda ni nada de eso, ni mucho menos los caminos que tenemos ahora. Los arrieros dejaban a sus burros frente al colegio, a un lado del jardín y frente a la casa de los Durán en "el otro jardín".




La gente por lo regular era muy religiosa y "recogida" aunque nos contaban mis antepasados que, siempre había alguna pelea en la que alguien resultaría muerto de un balazo. Nos contaba mi papá Chuche, que Jesús González, alias "el ciego" mató a un hijo de su prima Agustina González llamado Palemón Cabrera González en una de esas fiestas y jamás se le volvió a ver en el pueblo a Jesús González por muchos años. En otra ocasión supuestamente a la hora de la serenata, mi abuelo vio por el postigo de la ventana en el Portal de las Flores, que un hombre mató a un soldado, esparciendo los sesos del difunto entre el pan y por toda la pared de la casa, mi abuelo lavó con mucha agua el lugar. Contaban que cuando eso sucedía, se terminaba la serenata y todo mundo se metía a sus casas. Eran épocas tristes si se pone uno a analizar la situación en general del pueblo. No había inauguraciones de la fiesta por parte del H. Ayuntamiento ni del presidente como lo hacen ahora. La fiesta era una verdadera celebración religiosa que no tiene nada que ver con el gobierno civil del pueblo. En mi opinión, al César lo que es del César y a Dios, lo que es de Dios.

En cuanto a las iluminaciones de todo el novenario. Se hacían con faroles multicolores y papel picado que se decoraba el frente de cada casa. Aunque ahora no mucha gente decore así. Creo que al final de la calle de Hidalgo aun adornan con mucho papel picado en color azul y blanco. A la calle que le tocaba la iluminación, ese día la gente se iba a esa calle a festejar la novena y la banda de música se estaba allá tocando varias horas para al finalizar la noche, se iba al quiosco a terminar la celebración con la serenata. Algo así como lo hacen ahora para la fiesta de la Navidad. Esa calle es la que está celebrando el día de la novena y todo mundo, celebraba en esa calle y luego en la plaza.

Cuando yo era niño, llegaban los puestos y se ponían en la calle que existió frente al Portal Hidalgo solamente. Los puestos de comida se ponían en la calle frente al Portal de Las Flores hasta el Colegio y las ollas, en la calle de Pino Suárez. En el otro jardín se ponían alguna gente con mesas y vendían confeti, huevos rellenos de confeti y flores. De la misma forma en la plaza principal. Los puestos del pan, en frente al Portal Zaragoza. Solamente esos puestos llegaban y el día de la fiesta, recuerdo haber visto a personas vender rosarios en unos como tendederos de madera con clavos, vendían novenas y estampas de los santos. En realidad no era la fiesta como es ahora, para nada. La última vez que estuve en el pueblo para los días de la fiesta, no daba crédito a lo que veía. ¡Un mundo de gente! Había tanto coche, que se estacionaban por toda la calzada hasta el panteón. No solo la música de viento tocó, también grandes grupos que llegan a tocar en la plaza principal con escenario de lujo y tocan a todo volumen hasta las deshoras de la noche. Algo increíble.

La fiesta ha cambiado, nuestras costumbres también. Creo que la gente va a la fiesta, no a visitar a la festejada, no se como recaudan limosnas en la parroquia para poder pagar los gastos todo el año. En la presidencia, hacen su agosto por medio de la religión porque usan a Nuestra Señora de la Candelaria como "aparato" para atraer a la gente. Eso no se vale, mezclar la religión con la política no es nada bueno en mi punto de vista.


Mi abuelo nos contaba que cuando él era pequeño, no sacaban mojigangas, monigotes ni cabezones a bailar. Eso sucedió a finales de los sesenta con unos "cabezones" que elaboró "Tone Tone" Sandoval. Muy bien hechos y eran como seis o siete de ellos de muy buena proporción y danzaban por todo el pueblo.

El último día de la novena se realizaba con con-celebración eucarística, se llevan a bendecir miles de velas y la gente llevaba muchísimas flores a la parroquia. Creo que ahora lo hacen al "Templo Nuevo". En fin que la fiesta dejaba muchísima basura en toda la plaza, "alteros" de cáscaras de cacahuates, naranjas y cañas de azúcar que era lo que más se consumía en esas épocas. Todo cambió como tiene que ser y es la vida, sin embargo, la tradición de ir a visitar a Nuestra Señora de la Candelaria el dos de febrero persiste hasta nuestros días. Para beneficio de quien sea, sigue existiendo la fiesta, a la Virgen de mi pueblo. Nuestra Señora de la Candelaria.


sábado, 22 de enero de 2011

Oración a Las Ánimas Benditas.





"Animas benditas que en el purgatorio estáis
y grandes penas pasáis,
el Señor que os metió,
tenga por bien de sacaros
y en cielo aposentaros.


Pater, noster. Amen, Jesús"

viernes, 14 de enero de 2011

Israel Erick Vela González, otro de mis primos, ha fallecido.






Lupita, Lalito, Paulina abrazando a Israel, Pedrito, Alfredo, Chelito, Edgar, Antonio y Eunice.

Israel, el hijo menor de mi tía Lola González, ha muerto. El es mi primo en segundo grado. Su abuelo, Leopoldo González Solís y mi abuelo, Jesús González Solís son hermanos. Compartimos el segundo apellido González por ser nuestras madres quien llevan ese apellido. 


Lalito, Paulina, Pedrito, yo Alfredo, Lupita y en sus brazos Eunice, Edgar y entre las plantas, Israel y Antonio que ambos, requiescat in pace. 


Eso me causa mucha tristeza y consternación y me deja con sentimientos de zozobra. No me lo puedo explicar a mi mismo y no puedo creer que yo lo vi pequeño y ahora enterarme que ha muerto. La vida es tan corta. 


Israel, tomando un descanso en el cráter de San José de Parangueo, en el Valle de Santiago.




Los detalles de su fallecimiento no los se. Se que murió el sábado 8 de enero de 2011 en León Guanajuato. Lo único que sabía que se encontraba enfermo de leucemia y que estaba en tratamiento de radiaciones y medicaciones en León Guanajuato. La última vez que me comuniqué con él fue el 21 de noviembre. Acababa de pasar su cumpleaños, creo que tendría él unos 32 años según mis cálculos aunque no estoy seguro. Con Isra, nos divertimos mucho. Desde que él era un niño, hasta el año pasado que fue la última vez que lo vi en casa de mi madre. Él siempre gentil y educado, me contó que estaba viviendo en la ciudad de México y que estudiaba cinematografía. Platicamos de cosas de primos y de planes a futuro. Nunca me esperé, escuchar que había muerto, jamás. 


Requiescat in pace. 


Antonio, Lupita, con Lalito, Paulina, Pedrito haciendo cuernos a Israel que carga a Eunice en brazos, Alfredo, Chelito y Edgar.

lunes, 10 de enero de 2011

La Rosca o Roscón de los Reyes Magos.

He estado algo ocupado y comenzé con entradas que nunca terminé. Por eso, hoy ya diez de enero, termino entradas anteriores. Anteriormente, al escribir una entrada, la podía guardar y publicar con la fecha con la que comenzé la entrada. Ahora no he podido y por eso, ésta entrada del día de los Reyes Magos, aparece con fecha diez de enero.

Con el 6 de enero, celebramos en Iberoamérica, la tradicional rosca de reyes y los regalos que los Reyes Magos les traerán a los niños que se portaron bien el año anterior. La Rosca de Reyes, es el producto principal del Día de los Reyes Magos. La rosca representa una corona que se adorna con fruta seca acitronada de diferentes tipos y en su interior lleva la figura de un muñequito de porcelana que representa al Niño Dios.

En México, es tradicional que las familias compren o preparen una Rosca de Reyes. Una celebración donde la máxima emoción se presenta al momento de partirla: quien encuentre al Niño Dios hará una reunión el 2 de febrero, día de la presentación del niño Dios al templo, e invitará los tamales y buñuelos a aquellos que participaron en la rosca de Reyes. Cuando era yo estudiante de la Normal Oficial Primaria de Irapuato. La maestra Amalia que impartía la clase de Sociales, nos juntó a todo el grupo y compartimos una rosca de Reyes. Ella misma, celebró y organizó con nosotros, la presentación del niño Dios el dos de febrero.

Se cree y se asegura que la Rosca de Reyes tiene su origen en Francia. Supuestamente allá se creó la rosca que escondía dentro una haba. En la actualidad, existe un pan que tiene el nombre de "galette des rois" o torta de Reyes. Es de forma plana y de pasta de hojaldre. En la madre patria, España, se le llama Roscón de Reyes y se hace con agua de azahar, se decora muy parecida a las roscas mexicanas, pues la nuestra es descendiente de la española.
La Rosca o Roscón de Reyes, es un pan tradicional que con su celebración, se llega a la mitad de las fiestas de la Navidad. Se cierra oficialmente la Navidad con el dos de febrero, que es la presentación del niño Dios al templo.

La Rosca de Reyes representa una corona, la cual es adornada con fruta seca y cristalizada de diversos colores. Los frutos secos simbolizan las joyas incrustadas en las coronas de los Reyes Magos y significan: paz, amor y felicidad.

Según la iglesia católica, los frutos cristalizados representan las distracciones del mundo que impiden encontrar a Jesús. La forma redonda aunque en México se le hace ovalada indica el amor eterno de Dios, el cual no tiene ni principio ni fin. El compartir el pan con familiares y amigos significa la comunión con lo sagrado del niño Dios. La figura representativa del niño Dios dentro de la rosca recuerda el momento cuando Sr. San José y la Santísima Virgen María escondieron al pequeño Jesús para salvarlo de la furia de Herodes que lo quería destruír y matar. La tradición de la Rosca de Reyes indica que quien encuentre al niño Dios, lo cuidará, lo vestirá y lo presentará en el templo el 2 de febrero, tal y como la Santísima Virgen María lo presentó.

En el mundo católico y en mi pueblo, el día dos de febrero es día de Nuestra Señora de la Candelaria y es una tradición el presentar a los niños al templo y la bendición de las velas, que es lo que Nuestra Señora de la Candelaria representa.

Es así, el significado de la Rosca o Roscón de Reyes que se come con una taza de chocolate de mesa, caliente y es una tradición muy arraigada en nuestros pueblos hispanos.



Ahora, elabora tu propia Rosca de Reyes. Si tienes pequeños en la casa, sugiere que participen en la elaboración, se van a divertir y será más emocionante la hora de partirla y encontrar al niño Dios dentro de la rosca.

Rosca de Reyes

2 sobres de 11 gramos c/u de levadura en polvo
4 cucharadas de agua tibia
2 cucharadas de azúcar
1.400 kg de harina de trigo
1 taza de azúcar mascabado
4 huevos
1 lata de leche evaporada
1 lata de leche condensada
½ taza de agua
4 yemas de huevo
270 gramos de mantequilla
4 cucharadas de esencia de naranja
1 huevo ligeramente batido
12 tiras de acitrón
12 tiras de higos cristalizados
12 tiras de tuna cristalizadas
Muñecos para rosca

Para la cobertura:

250 gramos de harina de trigo
165g de mantequilla
1 taza de azúcar glass
1 cucharadita de polvo para hornear

Horno precalentado a 180°c o 350 grados F.

En un recipiente coloca la levadura con el agua tibia y las cucharadas de azúcar. Forma un volcán con la harina, la levadura preparada y la taza de azúcar mascabado; agrega los huevos con la leche evaporada, el agua, las yemas, la mantequilla y la esencia de naranja. Integra todos los ingredientes hasta formar una pasta; amásala y golpéala contra la mesa hasta que quede suave y tersa. Déjala reposar en un lugar tibio tapada con un trapo húmedo hasta que doble el volumen.

Divide la masa en dos partes iguales, extiéndela con un rodillo y distribuye los muñecos; enróllalas a lo largo, pásalas a una charola engrasada y forma la rosca. Deja reposar hasta que doble su volumen. Para la pasta de azúcar, mezcla la harina con la mantequilla, el azúcar glass y el polvo para hornear hasta obtener una pasta. Divídela en tiras y colócalas en la rosca, junto a la fruta cristalizada, en forma decorativa.

Barniza las roscas con huevo y se hornea por 30 minutos o hasta que estén doradas.

Receta de la Rosca de Reyes

Ingredientes:
1 kilo de harina.
12 huevos.
300 gramos de azúcar.
250 gramos de mantequilla.
120 gramos de manteca.
5 cucharadas de agua tibia.
1 cucharadita de sal.
1 cucharada de té de azahar.
2 sobrecitos de levadura o 1 1/2 cucharadas.
Decoración del Roscón de Reyes
3 higos cristalizados en gajos.
10 cerezas en almíbar rojas y verdes.
1 barrita de acitrón cortado en tiras.
1 naranja cristalizada cortada en tiritas.
1 pera cristalizada.
Muñequitos de porcelana.
2 cucharadas de azúcar pulverizada.

En un vaso mezcle dos cucharadas de harina, media de azúcar y la levadura. Agregue agua tibia y revuelva con la cuchara. Reserve.
Sobre la mesa o en una tabla de amasar forme una fuente con el resto de la harina previamente cernida, aparte dos cucharadas. Alrededor de la harina vierta la sal, el azúcar, la mantequilla en trozos y 100 g de manteca guardando dos cucharadas para usar mas tarde.

En el centro vierta el té de azahar. Comience a mezclar los ingredientes con una mano y con la otra agregue poco a poco los huevos, deje uno para luego untar las roscas. Amáse aproximadamente diez minutos hasta obtener una masa manejable.

Agregue la levadura que reservó. Amase y golpee la mezcla hasta que se despegue de las manos y de la mesa. La masa estará lista cuando logre que se estire unos 30 centímetros sin romperse.

Coloque la masa en un cajete, cúbrala con la manta de cielo y déjela reposar en un lugar tibio hasta que duplique su tamaño.
Rosca de Reyes rellena de frutos secos.
Amase nuevamente y forme dos tiras largas y delgadas. Coloque una tira en cada charola previamente engrasada, uniendo los extremos para darles forma de rosca. Introduzca los muñequitos.

Si desea una rosca de pascua rellena, siga los siguientes pasos:
Una vez que forme las tiras de masa, aplánelas ligeramente con el rodilla.

A lo largo de la tira, coloque la fruta acitronada. Envuelva la fruta, cuidando que la masa quede bien sellada. En un recipiente vierta las dos cucharadas de harina que reservó, dos cucharadas de manteca y el azúcar pulverizada. Mezcle hasta formar una pasta.
Barnice con el huevo batido y decore con la fruta. Con la pasta anterior forme tiritas, aplánelas con las manos y adorne las roscas.

Deje reposar las roscas hasta que dupliquen su tamaño en la cocina caliente.
Introdúzcalas en el horno caliente en la parte media a 200°C. Hornee durante 30 minutos o hasta que se doren.

Consejos para hornear.

Para que al hornear la rosca no pierda su forma, es importante que esta quede delgada y que el círculo interior sea grande. Para evitar que la rosca se dore demasiado de la base le sugerimos colocar una charola en la parte inferior del horno. Ésta receta fue proporcionada por el Centro de Tecnología Doméstica de la Procuraduría Federal del Consumidor en México

Léa más en:
Rosca de Reyes. Simple y barata http://recetasfestividades.suite101.net/article.cfm/rosca-de-reyes-simple-y-barata#ixzz1AYISkTfX

Pablo Picasso, en Seattle.



Ayer domingo y gracias a mi buena amiga Brianna, asistí a la exhibición de algunas de las pinturas de Pablo Picasso en el Museo de Arte de Seattle. Son piezas que vienen del Musée National Picasso de París, Francia y... si entendí bien, pertenecían a la colección privada de Pablo Picasso. Ha asistido tanta gente, que es casi imposible andar con facilidad dentro de la exhibición. Se tiene que reservar el boleto por hora pues la afluencia de visitantes es muy grande. Es de las exhibiciones de gran importancia que el museo de Seattle ha podido atraer al Noroeste.



Entre las pinturas de tan renombrado artista, se encuentran varias que a mi en lo personal me gustaron. "Dos mujeres corriendo en la playa" "El retrato de Dora Maar", "La Celestina", "Un gato atrapando a un pájaro" y "La Corrida: la muerte de un torero" entre otras. Son impresionantes todas las pinturas de ese gran artista. La exhibición estará abierta al público, hasta el 17 de enero de 2011. Entrada general es de $23.00 dólares.


domingo, 9 de enero de 2011

¡¡¡Me "Agarró" la Noche Vieja en Chicago!!!




Éste año de 2010 que termina, me a cojido en un Chicago congelante con el inicio de 2011. Es increíble pensar que otra década se nos ha ido y con ella, mi madre. Además de un sin número de gente que conocí en mi infancia y que se han marchado a la eternidad. Me aventuré a ir de visita a la ciudad de Chicago sin previo aviso a visitar a mis hermanos y sobrinos. Mi tío Jesús  que tuvo una operación en un ojo y a estar en casa porque con la temperatura tan gélida, no se puede andar por mucho tiempo por las congeladas calles de esa tan hermosa ciudad. Aunque, tuve que andar por algunos sitios porque eso de caminar en la ciudad de Chicago me encanta. 




Me aventuré a dar una visita a mis hermanos y sin avisar de repente. Simplemente llegué a su casa y les sorprendí. Hacía muchísimo frío y no sentía lo que es vivir el crudo invierno en Chicago desde 1992. Es que la verdad que tienen que tener el corazón de esquimales si se desea vivir allá. No se como es que los indígenas americanos le hacían para sobrevivir en tan gélido clima. Llegué el 24 de diciembre, pasé la navidad y el año nuevo allá celebrando y bebiendo deliciosas margaritas y caballitos de tequila Don Eduardo con mi hermana Quela. 


Antonio, Diego, Joaquín Alfredo, Frida, Andrés y Maximiliano de Todos los Santos.


Así terminó 2010 y comenzó 2011 conmigo en Chicago Illinois, en éstos enormes EE.UU.